Archivos para diciembre, 2020

#196

autor: tenejapanboy

Sobre el inche documental del ulero de Santaolalla, transmitido en Netflix quiero vomitar mi opinión.

La pretendida serie documental de Santaolalla, que transmite Netflix, más bien me pareció un seudodocumental pretencioso, que para colmo tiene como subtítulo «La Historia del Rock en América Latina» pa su uta madre de soberbio.
«Rompan Todo» bien pudo llamarse…más bien ¡Debió llamarse! «El ego de santaolalla al full» o «si no los produje yo (Santaolalla) no existen.»


Santaolalla no sólo soslaya ( cacofonia premeditada) el rock más auténtico de México (el pinche Lora menciona solamente al «Tri», ninguneando de forma grosera y además malagradecida la trayectoria del Three Souls in My Mind y el endejo de albarrán, o como se llame ahora, igual, diciendo «el Tri» ), sino que se regodea en restregarnos en la cara su carrera (en la cortinilla promocional, o iagen promocional del programa en imagenes grandes aparecen puro rockero sudamericano y solo una imagen de los Café Tacuba con otros que ni idea, todos amontonados, pa la suya), de como productor y con ello a sus rockeros fifis (me curo en salud: hablaré del rock en México, porque de él pretendo saber un poco, muy poco, pero lo suficiente. Del rock argentino, chileno, colombiano, me abstengo porque no se ni madres), a sus cuates, a los que a él le gustan, a los que él produjo y dirigió, a aquellos que «triunfaron» en su plan de negocios y que en la actualidad tienen como máximo logro ( en la mayoría de los casos, con sus muy escasas excepciones), departamentos o casas de pequeños burgueses, con cuadros bien colgaditos, escaleras muy limpiecitas, sofazotes, ventanales que dan a un enorme jardín, etcétera, todo como escenario prefabricado ser entrevistados y presumir su » éxito» , jajajaja bien asimilados al mainstream los rockeritos de sololo

Y es que, tan fácil hubiera sido prescindir del subtitulo ya mencionado y dejarlo en su «rebelde» «Rompan Todo», pero no, si no le hubiese puesto ese subtítulo, el programa hubiese tenido mucha menos audiencia, habría pasado como un documental de Netflix y muchos de nosotros nos hubieramos ahorrado muchas horas nalgas frente a la pantalla, porque seguramente no lo hubiéramos visto.

Por otra parte, dos de las cosas que más se da a notar entre todos los entrevistados, es que todo estaba mal con la sociedad y los rockeros eran a toda madre.

En lo que respecta al primer punto, la sociedad y el gobierno, en el caso de Sudamérica, la represión estaba gruexa, amenazas de desaparición y hasta de muerte por ser joven greñudo y rockero, con tales amenazas, no quedaba otra que el exilio a donde fuera.

En México, la cosa estaba cabrona, lo que no quiere decir que estaba tan culera como en Sudamérica, acá tampoco era chido ser rockero, al Batiz casi lo dejan de a pirata, pues de una madrina casi le sacan un ojo de la cara (sic), pero no hubo tanta presión como para irse de exiliado a rolarla por otro país, ni andarse escondiendo de la tira, la cual, por otra, parte era indirectamente beneficiada con el rock clandestino de los Hoyos Funkies de la Ciudad de México y zona conurbada (Neza principalmente), púes estaba coludida con los organizadores de las tocadas en los hoyos funkies, para que cuando estuviera ya macizos los chavos de onda, y el toquín ya estuviera bien prendido, la chota llegará y agarrará parejo y a putear y a robar al que se encontraran y si eran chavas, a manosear a las princesitas. Me caí que todo estaba perfectamente calculado. Los polis sacaban lana robando a la chaviza y extorsionando a los que llevaban su mota o activo; y los que organizaban el toquín, llevándose la lana de la taquilla sin siquiera pagar lo que les restaba a las bandas que tocaron o ya no alcanzaron a tocar.

En el segundo punto, los rockeros descubiertos, pulidos, producidos y vendidos por santaolalla, nunca hacen una autocrítica a su música, a sus «aportaciones» a su amafiamiento para cerrar (conciente o inconcientemente) el circulo de las grabadoras extranjeras y de los espacios ya «legalizados» para presentarse a otros grupos

(Los Hoyos Funkies y yo sumo las disqueras mexicanas como por ejemplo Discos Denver, Cisne Raff, entre otras) «Representaban el espacio alternativo frente a un circuito comercial en el que no se integraba este rock, porque ni los grupos ni sus seguidores estaban interesados en hacerlo.»(Molina:2012:1)

El mentado seudodocumental del tal santaolalla, es una mentada de madre a músicos como Charlie Montana, Paco Gruexxo, TexTex, Dug Dugs, León Chávez Texeiro, Rockdrigo, la Camerata Rupestre, el Mastuerzo, Tinta Blanca, Federico Arana, Banda Elástica, Banda Bostik, Rebel’d Punk, Chac Mool, Iconoclasta, Las Ultrasónicas, San Pascualito Rey, Cecilia Toussaint, y un shingo de bandas ninguneadas de mala forma.

El rock desde siempre, ha estado infectado por unos virus desde los 60’s y esos virus son los productores mafiosos como santaolalla, que han coptado la entrada de verdaderos grupos de rock al medio musical. Ese inche seudodocumental es un mea culpa del tal santaolalla hdspm.

Tal vez lo que buscaba santaolalla, era congraciarse con la escena del rock argentino y de paso se le ocurrió que era buena idea cuentear a Netflix con que iba a hacer un documental de la historia del rock en latinoamérica y Netflix se la tragó todita y permitió este bodrio que sólo apantalla a los distraidos, o sea, a los que nunca han oído nada de rock mexicano y creen que El fer de Mana es la máxima estrella del Rock Mexicano y que alejandra guzmán (que afortunadamente no sale en el seudodocumental, lo que es de agradecerse. Al igual hay que agradecer, y ese es uno de los pocos aciertos de «Rompan Todo», que no aparece la Chela Lora), alejandra guzman es rockera y que Leonardo de Lozanne es rockero, jajajaja, y tuvo más de un éxito después de su «microbito» .

1. Molina, M. A. (2012) Los hoyos funkies en la Ciudad de México, recuperado el 27 de diciembre del 2020 de https://distintaslatitudes.net/archivo/los-hoyos-funkies-en-la-ciudad-de-mexico

México de Luto

#195

Autor: @tenejapanboy

Este año en todo el mundo se canceló la Navidad. No había mucho que celebrar, el Covid 19 había pegado muy duro en muchos países y con él, el desempleo, la falta de dinero y el cansancio y aburrimiento de permanecer encerrado como medida preventiva para no enfermarse.

Había el llamado a no reunirse con la familia extensa, con los tíos, tias, primos, primas, amigos, amigas, colados, coladas, etcétero y etcétera. La familia nuclear papá, mamá e hijos que incluían a las variantes mamá, mamá e hijos o papá, papá e hijos o los papás y mamás sin hijos o los hijos sin papás, etcétera, si se podían reunir (no les quedaba de otra).

Para León, esto de vivir aislado no era nuevo, él vivía desde hace muchos años sólo, su esposa había fallecido hace muuuuucho tiempo y él, a los 70 años, no había logrado establecer una nueva relación con otra mujer, y al transcurrir del tiempo, León se resignó a vivir sólo en su departamentito de interés social que había conseguido con el INVI, el cual fue por un mucho tiempo, el nido de amor de León y Mathilda, su esposa.

No, no tenían hijos, la suerte no los premió con ellos y la familia de ambos rompió los lazos que los unían por problemas de edades. Si, León era mucho mayor que Mathilda y pues eso no le gusto al grupo de personas que eran sus familiares por ambos bandos y terminaron por señalarlos como no gratos para sus respectivas y conservadoras familias. Lo que no fue un impedimento para que León y Mathilda fueran muy felices en su pequeña isla de interés social.

La Navidad era especialmente difícil para León, pues él y Mathilda tenían como tradición, hacer un tiempo en las labores de ambos. León era taxista, de hecho lo seguía siendo y Mathilde era profesora en la secundaria pública número 7 turno vespertino, que se ubica en el Centro Histórico de la siempre leal y muy bella Ciudad de México. Pues como les iba diciendo, apartaban un tiempo que dedicaban para adornar su pequeño departamento de 40 metros, con todos los adornos de navidad que entre ambos había juntado a lo largo de los años y si, se llevaban un buen de tiempo, pues era cosa de poner series de luces, muchas, muchas series por todos lados, muchas, muchas luces, poner el arbolito y saturarlo de esferas y el nacimiento con los tradicionales, mula, buey, San José, la Virgen, el ángel, los pastores, los políticos, los borregos, los guajolotes, los Reyes Magos, la que vende nopales, el que vende carbón, los puerquitos, los pozos, los puentes, el lago de papel aluminio y obvio el niño Dios.

En este mes de diciembre del 2020, León veía difícil poder seguir con la tradición, ya los años le pesaban y no se sentía bien de salud, tosía mucho y ya había tenido fiebre y dolor de cuerpo, no sentía el olor de la comida, ni el sabor y por momentos no podía respirar, tanto así que desde principios de diciembre había dejado de trabajar el taxi y se la había pasado con tés y paracetamol para sentirse bien, pues no tenía servicio médico y él había sido, toda su vida, reacio a visitar médicos, así que con los remedios caseros la iba llevando.

Así las cosas, entre malestares físicos y la edad, el tiempo pasó volando y León, de repente se dio cuenta que ya era 24 de diciembre y el atraso en el adorno navideño del departamento, el árbol de navidad y el nacimiento era enorme, hasta parecía obra del Tren Interurbano México-Toluca y de reversa, que por tranzas y corrupción el copetes peña nieto quedó tirado y con un gasto millonario no justificado.

Extrañamente, la mañana de ese día 24 de diciembre, León se sintió muy animado y se dio un buen baño, desayuno bastante bien y percibió una energía inusual que lo animaba a echar manos a la obra y adornar su pequeño departamento al igual que cuando lo hacía con Mathilda.

En esas estaba muy animado León, cuando tocaron a su puerta, lo cual lo desconcertó, quien se preguntó quien tocaría a la puerta; los vecinos imposible, nunca lo saludaban cuando se topaban con él en las escaleras del edificio y cuantimenos lo visitaban en su departamento para saber si necesitaba algo, pero ante la insistencia, León fue a ver quien tocaba y al abrir se encontró de frente con Mathilde.

¡La sorpresa fue mayúscula! ¡León se tallaba una y otra vez los oclayos! pues no daba crédito a lo que veía, ¿Mathilda? ¿Ahí? ¡Imposible! pero ni tiempo tuvo de reaccionar, una Mathilda proactiva lo cominaba a que se apurara, sólo había venido a ver el nacimiento, el árbol y el departamento adornado, pasar la noche buena juntos y a llevárselo de ahí en Navidad a un lugar mejor (cosa que no entendió del todo León). Pero Mathilda al momento notó que León no había cumplido con adornar el departamento, así que por iniciativa de ella, ambos echaron manos a la obra y se pusieron a adornar lo que se tenía a adornar y una vez terminado el ajuar de navidad, Mathilda se puso a cocinar la cena de Noche Buena-Navidad, la cual, para alegría de León, quien no salía de sus sorpresa de tener a su esposa ahí con él, le preparó unos romeritos con tortas de camarón, un caldo de camarón y unas empanadas de camarón (creo que a León le gustaba el camarón) acompañado con una buena caguama León negra bien elodia.

La Cena fue maravillosa, la Noche Buena como ninguna, Mathilda y León brindaron con sidra de Puebla, rieron y bailaron al son de la marimba (León era chiapaneco, creo de la costa, de un pueblito llamado el Zapotal), se abrazaron, se besaron, teniendo como escenario su iluminado departamento de interés social, el cual brillaba como nunca. Y entonces, llegó la Navidad y León y Mathilda viéndose amorosamente, supieron que era tiempo de partir.

Mathilda ya conocía el camino y León se dejó llevar, feliz, pues como que había rejuvenecido, ya no le dolía el cuerpo, ya no tosía, ya no tenía fiebre, y no le faltaba el aire, bueno hasta olía el aroma a pino del arbolito de Navidad. León había tenido una Noche Buena y una Navidad como nunca y sobre todo, ahora tenía la compañía de Mathilda…

Los toquidos en la puerta del departamento cesaron, un vecino había ido a tocar para que León moviera su taxi, pues extrañamente lo había dejado sin freno de mano y sin velocidad, lo que provocó que se recorriera del lugar donde estaba, hasta el punto que obstruía el portón del garaje el vecino que había ido a buscar a León. Los vecinos al oír la insistencia de los toquidos, salieron a ver que pasaba; la mayoría al cerciorarse que era algo de poca importancia volvieron a la fiesta de Noche Buena Navidad dentro de sus departamentitos, donde la mayoría se había reunido con diez o veinte parientes o amigos y al son de cumbias, salsa, reggeton y uno que otro rock, festejaban alegremente, sin usar gel, ni cubrebocas, ni manteniendo la sana distancia. Alguien, de los que todavía aguantó mas por la curiosidad y el morbo a ver que pasaba con el vecino que dejaba su taxi estorbando, le sorprendió que no hubiera luz dentro del departamento de León y lo comentó con otro vecino, pero a ambos no les ocupó más el asunto y regresaron a su Noche Buena Covid 19 a seguirse contagiando…de la sana alegría navideña, tan promocionada por la Rata Salinas PRIego.

Días después, por una llamada de los vecinos al 911, los bomberos entraron al departamento de León y Mathilda, el cual se encontraba desordenado, sin luces navideñas, el arbolito de navidad tirado, sin armar, algunas esferas rotas en el piso y ni rastros de un nacimiento.

Alguien entró en la recámara de León y dio un gritó…en ese momento supieron que León tenía muchos días de haberse ido.

Tenejapanboy

México de Luto.

@tenejapanboy #194

NARANJA ES EL NUEVO ROJO

En las más recientes semanas, en la Ciudad de México, nos hemos estacionado en un cruce, ni pa trás, ni pa delante; todo a causa de un semáforo en NARANJA, no en ROJO, no en AMBAR…En Naranja y este color Naranja tan particular, no ha cambiado a pesar de cifras de camas ocupadas y de mexicanos fallecidos por COVID19, para arriba y para abajo. Tal parece que el mentado semáforo se descompuso y ya no cumple con la función para la que fue creado, pero ahí nos tiene detenidos.

TE SOLTÉ LA RIENDA.

El primer caso de COVID19 en México se detectó el 28 de febrero del presente año. Para el 16 de marzo de 2020 se implementó la Jornada Nacional Para La Sana Distancia, que tenía como periodo de conclusión (jajajajaaja), el 19 de abril. El Semáforo de Riesgo Epidemiológico, fue puesto a «funcionar» después de que el 13 de mayo el gobierno federal levantó las restricciones para poder transitar libremente por el país, es decir, el gobierno «nos soltó la rienda» (citando a don José Alfredo Jiménez).

En esas fechas fue cuando se presentaron los municipios de la Esperanza (¿?), que eran territorios libres de enfermedad.

Fue exactamente el 01 de junio, cuando, el mentado semáforo comenzó a aplicarse en todo el país y con ello a regular las salidas y entradas de todos los mexicanos.

Es así que se fueron abriendo paulatinamente, algunos changarros, los cines, algunas oficinas.

Pero no se abrieron las escuelas.

Actividades consideradas para el SEMÁFORO NARANJA con estrictas medidas sanitarias:

  • 29 de junio: Trabajadoras/es del hogar, Comercio al menudeo, Clubes deportivos y actividades deportivas individuales al aire libre
  • 30 de junio: Centro Histórico de acuerdo con su programa especial
  • 1 de julio: Restaurantes (al 30% de su capacidad o al 40% si optan por el programa “Ciudad al aire libre”), Hoteles (al 30% de capacidad)
  • 2 de julio: Tianguis y Mercados sobre ruedas y bazares
  • 3 de julio: Estéticas, Peluquerías y Salones de Belleza
  • 6 de julio: Tiendas departamentales (al 30% de capacidad), Centros comerciales (al 30% de capacidad)
  • 20 de julio: Bibliotecas para préstamo de libros
  • 10 de agosto: Albercas abiertas y techadas Programa REABRE: Reapertura de Bares a Restaurantes
  • 11 de agosto: Museos (30% de aforo)
  • 12 de agosto: Cines (30% de aforo)
  • 23 de agosto: Teatros (30% espacios cerrados, 40% espacio abierto)
  • 4 de septiembre: Exposiciones y centros de convenciones
  • 8 de septiembre: Sucursales Bancarias
  • 14 de septiembre: Labores administrativas en universidades
  • 17 de septiembre: Acuarios
  • 18 de septiembre: Gimnasios (aforo máximo de 30%)
  • 22 de septiembre: Autocinemas
  • 28 de septiembre: Clínicas de atención médica de las universidades
  • 2 de octubre: Parques de diversiones
  • 2 de octubre: Bibliotecas y archivos históricos
  • 9 de octubre: Boliches
  • 9 de octubre: Casinos y casas de apuesta Fuente: Gobierno de la Ciudad de México

Así la situación con el mentado semáforo de riesgo epidemiológico, que consta de cuatro colores: ROJO, NARANJA, AMARILLO Y VERDE. y con el cual hemos regido nuestra vida desde la primera gran cuarentena de este 2020, o sea desde el inicio de la Jornada Nacional Por la Sana Distancia.

En México sólo dos estados han pasado por todos los colores del Rojo al Verde, estos son Chiapas y Campeche. En la Ciudad de México solamente hemos pasado del Semáforo ROJO a un Naranja muy acomodaticio.

EVERY BREATH YOU TAKE

Y es que, al semáforo ROJO, por alguna extraña razón le han sacado la vuelta, pues se había dicho que el parámetro de variación en el cambio de un color a otro, o sea, la variable que determina cuando pasamos de un color a otro en el semáforo, era el porcentaje de camas con respiradores que se ocupan y que el mínimo aceptable para volver al color ROJO, era un porcentaje de ocupación de 65% de camas con respiradores.

Fuente: Gobierno de la Ciudad de México

Pues con la novedad y no es por asustarlos, pero ya estamos en 64%, a un pelito de rana calva del porcentaje fatal, y ahora la Jefa de Gobierno nos sale que el color del semáforo ya no es su responsabilidad.

(Gráfico Andrés M. Ramírez)

Ya lo va a anunciar hoy la Secretaría de Salud, nosotros queremos fortalecer más allá del color del semáforo este llamado a la ciudadanía, por eso decimos que estamos en ‘alerta por COVID-19’, en emergencia por COVID-19 en la Ciudad. Se demostró que en esta semana hubo disminución de movilidad en varias alcaldías y hacemos un llamado a una participación mayor (11 de diciembre del 2020)”

Bellas Artes 12 de diciembre 2020 (foto via twitter )

…DE LOS QUE LLENAN LOS PANTEONES

A todo esto, es decir ¿Qué es lo que impide al gobierno determinar que se vuelva a a Semáforo ROJO?

Pues vemos el centro de la Ciudad de México que está a reventar, todos los comercios abiertos, viene gente de Chiapas, Oaxaca, San Luis Potosí ¡Hasta de Ecatepec y de Tultitlan! a surtirse de mercancía navideña (y de coronavirus que llevarán a sus respectivas localidades). Los centros comerciales están llenos, los reventones callejeros se encuentran al por mayor, los puestos de tacos llenos de tragones de los que llenan los panteones; y a pesar del tan anunciado cierre de la Basílica de Guadalupe, no faltaron los pe…regrinos que vinieron a darle gracias a la Lupita porque los curó de una enfermedad muy grave, que digo grave ¡Gravisima! ¿De Coronavirus? No, de otra.

Centro Histórico Ciudad de México (12 de Diciembre 2020 foto EVGG).

Y si por oscuros intereses el gobierno local no aplica el Semáforo Rojo, pues autoapliquenselo.

Y es que ¡Chales gente! de veras que o son brutos o son brutos, la enfermedad esta pegándole a muchos compatriotas, tanto que la Organización Mundial de la Salud pidió que la tomáramos en serio ¿y que hacemos? Pues vamos a fiestas de jalogüin, nos vamos a los antros, los panaderos hacen panes coronavirus, los piñateros piñatas coronavirus, hay bebidas coronavirus, calzones coronavirus, etcétera y salimos, y andamos sin cubrebocas y vamos a partidos de panbol (las Chivas Coronavirus), y vamos a visitar a la más de vieja de su casa y luego ¿Quién tiene la culpa? ¡Chales de veras dan coraje!

Y ni crean que la vacuna nos va a salvar a todos…ni se apunten. Cualquier persona que llega a los hospitales con una enfermedad respiratoria, ya sea gripe, inflamación de garganta, resfriado, moquillo, de inmediato es considerada «Sospechos de Covid» a partir de ahí es visto feo, es repulsivo, la gente le saca la vuelta y los médicos dicen que deben ir al TRIAGE ( triage o triaje  proviene de la palabra francesa trier que significa seleccionar, escoger, separar o clasificar). y si no hay TRIAGE, lástima Margarito, a ver dese una vuelta mañana para ver si alcanza ficha (Así le dijeron a un conocido en la Clínica Legaria del ISSSTE y para colmo, le dijeron que la prueba, de que no tenía COVID19, al haberla realizado en los Kioskos de Salud de Gobierno de la Ciudad de México, pues eran chafa y no confiable), como si 24 horas de espera con los malestares de cualquier enfermedad no fueran determinantes para la evolución nociva de la misma.

De verdad, no esperen a que el gobierno encienda el semáforo ROJO, autoimponganse el ROJO para que podamos algún día llegar al VERDE.

Ahhhhhhh y también cuídense de la Influenza.

(Gráfico Andrés M. Ramírez)

MÉXICO DE LUTO

@tenejapanboy